Las comillas también sirven para señalar dónde empiezan y dónde acaban algunas expresiones denominativas. Al igual que en casos anteriores, puede usarse la cursiva en vez de estas. Se tratan a continuación los principales usos de las comillas en expresiones denominativas:
a) Para citar cualquier parte interna de una publicación, como un artículo, un poema, un capítulo... Suelen usarse las comillas más frecuentemente cuando están junto al título de la obra, periódico o revista a la que pertenecen, ya que estas siempre van en letra cursiva (o letra redonda si el texto base está en cursiva):
- Para más información sobre la escritura de las siglas, por favor, consulte el apartado de «Siglas y acrónimos» de la Ortografía de la lengua española de la RAE en colaboración con la ASALE, editorial Espasa.
También, se escriben en letra cursiva y no entre comillas no solo obras literarias, periódicos o revistas, sino también obras de otra naturaleza, como las películas, cómics, cuadros, fotografías, piezas musicales, discos, programas de televisión o radio... Los títulos de las colecciones de las editoriales, por el contrario, no requieren ni de comillas, ni de cursiva, como
Barco de Vapor; tampoco los libros sagrados ni los de sus partes o libros internos (
la Biblia, el Corán, el Nuevo Testamento, el Génesis...). En estos casos, es suficiente el uso de la mayúscula en todas las palabras significativas para marcar la expresión denominativa.
b) En
títulos de libros que contienen a su vez el
título de otra obra, se recomienda escribir entre comillas este último, siempre que se cite por completo. Si el título de la otra obra está abreviado, el empleo de las comillas es opcional:
- Deberán consultar la mecanografía titulada El tiempo en «Cien años de soledad», interesante aportación al tema que nos ocupa.
- Martín de Riquer escribió Aproximación al Quijote, una de sus mejores obras.
c) Para delimitar títulos de leyes, programas, planes, proyectos, asignaturas, cursos... dentro de un texto. Se recomienda entrecomillarlos siempre que tengan una excesiva longitud, escribiéndose solo en mayúscula la primera palabra. Para las leyes, podría emplearse la letra cursiva en vez de las comillas:
- Como asignaturas optativas se ofrecen este año «Lingüística aplicada a la enseñanza de español como lengua extranjera» y «Comentario de textos poéticos españoles e hispanoamericanos del siglo XIX».
- La resolución cita la Ley 14/1999, de 15 de diciembre, por la que se fijan las sedes de las secciones de la Audiencia Provincial de Cádiz en Algeciras y Jerez de la Frontera.
Si por el contrario no tienen una excesiva longitud, no se usarán ni las comillas ni la letra cursiva al emplearlas, solo con mayúscula inicial en todos sus elementos significativos:
el Tratado de Utrecht, Plan Nacional sobre Drogas...
d) Para citar títulos de ponencias, discursos, exposiciones...:
- Se ha clausurado con gran éxito la exposición «Las vanguardias rusas», en Madrid.
e) Suelen escribirse entre comillas los apodos y alias que se intercalan entre el nombre de pila y el apellido, o puede usarse la cursiva también para este fin:
- Sergio «Kun» Agüero marcó el primer gol del partido.