Negua
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Sí, sobre el papel todos sabemos cuáles son las diferencias entre el iPhone 8, iPhone 8 Plus y iPhone X. Te lo digo desde ya: nadie se va a comprar el iPhone 8 normal, para eso compras el iPhone 7 (o incluso el Plus) y con lo que sobra contratas AppleCare+.
Así que aunque la teoría de las especificaciones son de sobra conocidas, pero como cuando vas a comprar un coche, al final prevalece y mucho el "intangible". Vamos, las sensaciones, la experiencia... un cúmulo de factores tan determinante como el listado de características.
Vaya por delante que trabajando como blogger tecnológico de Apple, un iPhone de 2018 voy a comprar sí o sí. Inicialmente lo tenía claro: ande o no ande, caballo grande... Y bueno, en realidad por dimensiones el más grande es el iPhone 8 Plus, pero por pantalla no es así. La cuestión es que pensé en el iPhone X. Pero con el paso de los días me he ido desinflando. Te explico por qué.
Sí, el iPhone X es brutal: diseño novedoso, todo pantalla, Face ID, no hay botón Home... es el móvil de referencia para los próximos años. Incluso Huawei se ríe del iPhone X en un anuncio. Cuando estás en boca de todos, significa que eres el rival a batir. Además, y esto es para mi muy importante: es ergonómico, tiene un pantallón en un tamaño que está a caballo entre el iPhone 8 y el iPhone 8 Plus.
Pero esto tiene una doble lectura: eres el pionero, el que marca el camino, el que se hace la senda. La historia del iPhone de Apple está repleta de éxitos, pero también tiene algunas sombras como el Antenagate o el bendgate , cositas nuevas que pueden pasar cuando tocas algo que funciona. Y es que como dice la máxima científica "si algo funciona, no lo toques". Pero a su vez, esto es tecnología: si no innovas, estás muerto.
Y aquí hay dos cosas que preocupan a todos: el Face ID y cómo funcionará en el día a día (ya vimos a Craig Federighi teniendo algún problemilla), deshacerse del botón Home y adoptar una barra virtual y por último pero no por ello menos importante, la pantalla OLED.
Sí, sabemos que hay muchos móviles sin botón Home y con pantalla OLED, pero ¿qué pasa si Apple mete la pata con cualquiera de esas cosas? ¿Qué pasa si aunque vayan bien, no van todo lo bien que se desearía? Recordemos un pequeño detalle: desde 1.159 euros. A ese precio, yo quiero algo perfecto y que me caliente la cena, si es posible.
Y luego hay un añadido: ¿qué pasa si no me apaño con el Face ID y me acaba resultando incómoda la ausencia del botón Home? Aquí ya no tiene nada que ver Apple, sino mi propia experiencia de usuario.
Ir al iPhone 8 Plus es ir a una fórmula que funciona, pero vitaminada: cuenta con el chip A11 que va a marcar el mercado en los próximos años (basta con decir que es tan rápido como el del Macbook), la carga inalámbrica y una óptica brutal, incluso mejor que la del iPhone 7 Plus. ¿Has visto ya las primeras fotos tomadas con él?
Y bueno, teniendo en cuenta que soy geek y que en un par de años me compraré otro, quizás me duela menos dejarme 900 euros.
Difícil disyuntiva. ¿iPhone 8 plus o iPhone X? ¿Tecnología maravillosa y consolidada vs innovación ultra cara y sin consolidar?
Así que aunque la teoría de las especificaciones son de sobra conocidas, pero como cuando vas a comprar un coche, al final prevalece y mucho el "intangible". Vamos, las sensaciones, la experiencia... un cúmulo de factores tan determinante como el listado de características.
Vaya por delante que trabajando como blogger tecnológico de Apple, un iPhone de 2018 voy a comprar sí o sí. Inicialmente lo tenía claro: ande o no ande, caballo grande... Y bueno, en realidad por dimensiones el más grande es el iPhone 8 Plus, pero por pantalla no es así. La cuestión es que pensé en el iPhone X. Pero con el paso de los días me he ido desinflando. Te explico por qué.
Sí, el iPhone X es brutal: diseño novedoso, todo pantalla, Face ID, no hay botón Home... es el móvil de referencia para los próximos años. Incluso Huawei se ríe del iPhone X en un anuncio. Cuando estás en boca de todos, significa que eres el rival a batir. Además, y esto es para mi muy importante: es ergonómico, tiene un pantallón en un tamaño que está a caballo entre el iPhone 8 y el iPhone 8 Plus.
Pero esto tiene una doble lectura: eres el pionero, el que marca el camino, el que se hace la senda. La historia del iPhone de Apple está repleta de éxitos, pero también tiene algunas sombras como el Antenagate o el bendgate , cositas nuevas que pueden pasar cuando tocas algo que funciona. Y es que como dice la máxima científica "si algo funciona, no lo toques". Pero a su vez, esto es tecnología: si no innovas, estás muerto.
Y aquí hay dos cosas que preocupan a todos: el Face ID y cómo funcionará en el día a día (ya vimos a Craig Federighi teniendo algún problemilla), deshacerse del botón Home y adoptar una barra virtual y por último pero no por ello menos importante, la pantalla OLED.
Sí, sabemos que hay muchos móviles sin botón Home y con pantalla OLED, pero ¿qué pasa si Apple mete la pata con cualquiera de esas cosas? ¿Qué pasa si aunque vayan bien, no van todo lo bien que se desearía? Recordemos un pequeño detalle: desde 1.159 euros. A ese precio, yo quiero algo perfecto y que me caliente la cena, si es posible.
Y luego hay un añadido: ¿qué pasa si no me apaño con el Face ID y me acaba resultando incómoda la ausencia del botón Home? Aquí ya no tiene nada que ver Apple, sino mi propia experiencia de usuario.
Ir al iPhone 8 Plus es ir a una fórmula que funciona, pero vitaminada: cuenta con el chip A11 que va a marcar el mercado en los próximos años (basta con decir que es tan rápido como el del Macbook), la carga inalámbrica y una óptica brutal, incluso mejor que la del iPhone 7 Plus. ¿Has visto ya las primeras fotos tomadas con él?
Y bueno, teniendo en cuenta que soy geek y que en un par de años me compraré otro, quizás me duela menos dejarme 900 euros.
Difícil disyuntiva. ¿iPhone 8 plus o iPhone X? ¿Tecnología maravillosa y consolidada vs innovación ultra cara y sin consolidar?
