
Sr.Anonymous
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Lo que empezó como algo más bien anecdótico, se ha convertido en todo un estándar. Los teléfonos ya no tienen apenas marcos, te guste o no.
Es cierto que esto tiene muchas ventajas, pero también tiene inconvenientes. Te quiero hablar de esto, de si nos estamos pasando o no, y de si habrá marcha atrás con este tema.
El primero en iniciar esto, fue ignorado
Los Sharp Aquos se lanzaron allá por 2014. Sí, 2014, hace tres años. Sin embargo, todo el mundo pasó de Sharp, y quedó como un concepto más, sin éxito ninguno.
No es la primera vez que vemos un concepto fracasar en sus inicios, y triunfar a posteriori, pero quién nos iba a decir que los teléfonos acabarían sin biseles, allá por 2014 cuando esto se quedó en nada.
El Mi Mix abrió la veda
El Xiaomi Mi Mix abrió verdaderamente la veda de los teléfonos sin marcos. Este era todo un terminal de gama alta, con un espectacular diseño en cristal y aluminio.
Con él, empezamos a plantearnos que se podían introducir 6 pulgadas en el tamaño de 5.5, el estándar de pantalla del año pasado, y que seguimos encontrando en marcas como Apple -salvo con el X- o OnePlus.
Más pantalla, menor tamaño, lo cierto es que este móvil sí que funcionó, y parece ser que se inició la moda a partir de él.
La gama alta tradicional siguió los pasos
A partir de 2017, casi toda la gama alta llegó sin marcos. Todo bien, todo bonito, pero en algunos casos perdimos cosas importantes, sin venir a cuento.
El lector de huellas ha sido el mayor damnificado por la llegada de los bezel-less. En móviles DISEÑADOS POR GENTE CON OJOS, NO SÉ, como el LG V30, el Pixel XL2 o el Xiaomi Mi Mix 2, este lector sigue en la parte de atrás, accesible y usable.
Otras firmas como Samsung, han puesto el lector en una posición troll, a la que, sencillamente, no vas a llegar. Luego está Apple en otro nivel, acabando directamente con el lector de huellas. Que sí, que te lee la cara, los ojos y el alma, pero a mi déjame el lector de huellas en su sitio.
Por último, quería comentar el tema de la fragilidad y los repuestos de estos móviles. Evidentemente, si tu móvil tiene más pantalla, tiene más probabilidades de romperse, y más caros son de reparar. Es decir, tenemos un mejor diseño, y pantallas más grandes en cuerpos más pequeños, pero todo tiene un precio.
¿De verdad todos los teléfonos tienen que ser bezel-less? ¿Te gustaría que se mantuviesen los diseños actuales o eres partidario de que cambien por completo?
Es cierto que esto tiene muchas ventajas, pero también tiene inconvenientes. Te quiero hablar de esto, de si nos estamos pasando o no, y de si habrá marcha atrás con este tema.
El primero en iniciar esto, fue ignorado

Los Sharp Aquos se lanzaron allá por 2014. Sí, 2014, hace tres años. Sin embargo, todo el mundo pasó de Sharp, y quedó como un concepto más, sin éxito ninguno.
No es la primera vez que vemos un concepto fracasar en sus inicios, y triunfar a posteriori, pero quién nos iba a decir que los teléfonos acabarían sin biseles, allá por 2014 cuando esto se quedó en nada.
El Mi Mix abrió la veda

El Xiaomi Mi Mix abrió verdaderamente la veda de los teléfonos sin marcos. Este era todo un terminal de gama alta, con un espectacular diseño en cristal y aluminio.
Con él, empezamos a plantearnos que se podían introducir 6 pulgadas en el tamaño de 5.5, el estándar de pantalla del año pasado, y que seguimos encontrando en marcas como Apple -salvo con el X- o OnePlus.
Más pantalla, menor tamaño, lo cierto es que este móvil sí que funcionó, y parece ser que se inició la moda a partir de él.
La gama alta tradicional siguió los pasos

El lector de huellas ha sido el mayor damnificado por la llegada de los bezel-less. En móviles DISEÑADOS POR GENTE CON OJOS, NO SÉ, como el LG V30, el Pixel XL2 o el Xiaomi Mi Mix 2, este lector sigue en la parte de atrás, accesible y usable.
Otras firmas como Samsung, han puesto el lector en una posición troll, a la que, sencillamente, no vas a llegar. Luego está Apple en otro nivel, acabando directamente con el lector de huellas. Que sí, que te lee la cara, los ojos y el alma, pero a mi déjame el lector de huellas en su sitio.

Por último, quería comentar el tema de la fragilidad y los repuestos de estos móviles. Evidentemente, si tu móvil tiene más pantalla, tiene más probabilidades de romperse, y más caros son de reparar. Es decir, tenemos un mejor diseño, y pantallas más grandes en cuerpos más pequeños, pero todo tiene un precio.
¿De verdad todos los teléfonos tienen que ser bezel-less? ¿Te gustaría que se mantuviesen los diseños actuales o eres partidario de que cambien por completo?