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NOKIA 8260
El año pasado, Apple, como siempre, presentó su terminal estrella. Aprovechando su décimo aniversario, introdujeron un nuevo diseño, y un sistema de reconocimiento facial bastante más avanzado que el de nuestros móviles Android.
Los fabricantes Android no tardaron en mover ficha, y empezaron a llover las copias. El notch, sistema de reconocimiento facial, diseño, gestos… Todo lo que el iPhone X trató de diferenciar como propio, ahora es parte de Android, y esto, aunque pueda parecer algo bueno, no lo es tanto.
Android es lo suficientemente versátil para diferenciarse de la competencia
Aclarar antes de nada, que la culpa de que ahora mismo Android sea un amasijo de copias del iPhone X no la tiene Google, sino los fabricantes. Estos, siguen la tendencia de mercado como es lógico, aunque es un problema bastante serio que un solo teléfono marque la tendencia de mercado para decenas de firmas.
Dicho esto, conocemos Android, conocemos a los fabricantes, y sabemos que tienen capacidad suficiente para hacer smartphones diferenciales, sin necesidad de copiar a Apple
Se trata de crear lo que funciona, no de copiarlo
Muchos fabricantes, como ASUS, Bluboo, o OnePlus, admiten libremente que Apple marca la tendencia de mercado, y que es necesario mirar en ellos para hacer productos que funcionen. La propia Samsung ha emulado los Animoji del iPhone X -sin brillar en el resultado final-, Huawei ha calcado directamente el diseño, LG prepara otro tope de gama con el notch…
No es malo adaptar lo que ya funciona, pero en nuestra opinión, si quieres diferenciarte como marca, debes crear algo nuevo, y no “inspirarte” en lo que hagan los demás, aunque sepas que va a dar buen resultado.
Samsung, Huawei, LG, OnePlus… Son firmas con recursos suficientes para hacer algo 100% propio. Si bien estamos viendo tecnologías propias y espectaculares, como la cámara con apertura variable del S9, o la triple cámara del Huawei P20 Pro, sigue oliendo a Apple en ciertos momentos, y como fanáticos de Android, queremos productos genuinos y propios.
Aunque Apple haya sido la más disruptora, no pasa por su mejor momento
A pesar de que el iPhone X haya sido el dispositivo “más innovador” del año pasado, la firma no pasa por su mejor momento, si analizamos fríamente su producto. El terminal estrella de Apple está por debajo en cámara, batería, rendimiento -por más que digan los Benchmarks, iOS 11 está menos optimizado que Android Oreo-, respecto a Android, y esto no juega una buena carta para Apple.
Históricamente, iOS ha estado más optimizado que Android. En 2017, Oreo se planteó como la cima del rendimiento para los móviles Android, mientras que iOS 11 es un sistema operativo cuyos errores siguen sin solucionarse meses después de su lanzamiento.
Los primeros test de iOS 11.3 muestran un descenso en la batería, y los foros andan llenos de comentarios negativos sobre esta última versión. Sin embargo, Android mejora a pasos agigantados desde la llegada de Nougat, Oreo llega lento -como siempre-, pero dando una segunda vida a muchos dispositivos, y Project Treble se presenta como el fin de la fragmentación, aunque tenemos serias dudas sobre esto último.
Android 9 estará centrado en el diseño, las animaciones y el pulido del sistema, mientras que iOS 12 será una revisión de los errores que Apple cometió en 2017, una muestra de que por fin vamos por el buen camino.
Es por esto que pensamos que los fabricantes deberían tomar lo mejor de las ROMs de Google, en lugar de intentar copiar funciones del iPhone que nunca funcionarán igual de bien que en iOS -por diferencias a nivel del propio código de ambos sistemas-.
Vamos por el buen camino, pero debemos mirar adelante, y no al vecino
Por primera vez en muchos años, Android le está cogiendo la delantera a iOS. El iPhone X está muy por debajo de muchos teléfonos de gama alta de nuestro sistema, y eso es algo excelente.
Por ello, queremos que los fabricantes sigan haciendo productos diferenciales, y que no pequen de mirar mucho al vecino, como está pasando en estos inicios de 2018. Poco a poco, Android se va acercando más a la perfección, aunque siguen vivos los fantasmas de las malas aplicaciones, la falta de optimización de ciertas capas de personalización, y la inmensa fragmentación entre dispositivos. Como siempre, mirar a Google es mirar en la dirección adecuada, y esperamos que los grandes OEMs se sigan dando cuenta. Huawei ya lo ha hecho con la inteligencia artificial en la cámara del P20, ¿quién será el siguiente?
